Hugo Neira: La importancia de la lectura, en países como el nuestro, va más allá del goce personal.
El director nacional de la Biblioteca Nacional del Perú, Hugo Neira, soltó ayer la verdad con sabor a letra de vals amargo: “Un país sin lectores es una amenaza para la democracia inclusive para el futuro de la economía de mercado.”Neira refirió que “un país con una línea de pobreza de más del 50 por ciento de no lectores crea una situación de emergencia que las empresas privadas conocen muy bien, y lo cual pide acciones extraordinarias” a todos los actores, para modificar este panorama.
El intelectual recordó que mientras en los países del primer mundo “las gentes van a leer a las bibliotecas o compran libros porque tienen conciencia de que la cultura les da acceso a la razón, al discurso, al conocimiento y al poder político que da el manejo de los valores simbólicos”, aquí se necesitan de programas particulares culturales que acompañen a la lectura, porque hay la percepción de que la biblioteca es “un lugar de castigo”. Y, por ende, solo dos de cada 10 niños comprenden lo que leen.
El gerente de la Fundación BBVA Banco Continental, César Reyes, se sirve de la cifra para hacer un símil: el nivel de bancarización en el país es solo del 20 por ciento. El resto prefiere la informalidad.
Clase media en la mira cultural
Neira planteó, desde su entidad, difundir la lectura focalizando los esfuerzos en la nueva clase media, de “los nietos de las migraciones”.
Se debe aprovechar la pujanza económica que se halla en lugares como el cono norte de Lima y saciar la sed de cultura de esa población: ya lo demostraron dos ferias de libros en la zona, con mucho éxito, dijo.
“Debemos crear formas de atracción de la lectura para esta población sin demasiada formalidad. Es una ingeniería que no existe en el mundo, porque vivimos algo único: un crecimiento económico que no se acompaña con una demanda cultural. Es rarísimo.”
Si se “empieza a mover” esta oferta, no será raro que en un corto plazo el sector informal también se una a este esfuerzo de la BNP y la empresa privada.
Sobre todo, recordó el intelectual, este ejemplo de consumo cultural y hábitos de lectura de la clase emergente impactará en los más pobres, que los toman siempre como referente.
No podemos hacer cosas convencionales ni sentarnos, como en Bélgica o Canadá, a esperar los lectores; debemos de crearlos.
Se debe aprovechar la pujanza económica que se halla en lugares como el cono norte de Lima y saciar la sed de cultura de esa población: ya lo demostraron dos ferias de libros en la zona, con mucho éxito, dijo.
“Debemos crear formas de atracción de la lectura para esta población sin demasiada formalidad. Es una ingeniería que no existe en el mundo, porque vivimos algo único: un crecimiento económico que no se acompaña con una demanda cultural. Es rarísimo.”
Si se “empieza a mover” esta oferta, no será raro que en un corto plazo el sector informal también se una a este esfuerzo de la BNP y la empresa privada.
Sobre todo, recordó el intelectual, este ejemplo de consumo cultural y hábitos de lectura de la clase emergente impactará en los más pobres, que los toman siempre como referente.
No podemos hacer cosas convencionales ni sentarnos, como en Bélgica o Canadá, a esperar los lectores; debemos de crearlos.
Convenio por la lectura
Hugo Neira y Carlos Reyes suscribieron ayer en las oficinas de la BNP un convenio marco, que permitirá incentivar diversas actividades para la promoción y compresión de lectura, sobre todo enfocada en la educación secundaria.
En una primera etapa de este acuerdo de tres años, la Fundación BBVA Banco Continental entregó 62 mil nuevos soles, que se destinarán a la capacitación de educadores y la edición de material didáctico.
En una primera etapa de este acuerdo de tres años, la Fundación BBVA Banco Continental entregó 62 mil nuevos soles, que se destinarán a la capacitación de educadores y la edición de material didáctico.
Neira informó que en breve la BNP firmará un acuerdo con la Derrama Magisterial, para que ésta designe a los profesores de colegios limeños que serán los primeros beneficiarios de este convenio que tiene por fin “hacer de la lectura una actividad cotidiana”.
El director nacional de la BNP aprovechó para invitar a que más instituciones privadas se unan a esta cruzada por la lectura. Agregó que su entidad espera en breve un espacio televisivo para ampliar la difusión de los hábitos de la lectura en la población.
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